Se propone reformular el sentido y el contenido de la Formación Ética y Ciudadana a partir de una resignificación del mandato social de la escuela. Para ello, se plantean los siguientes interrogantes: ¿qué significa hoy y aquí formar al ciudadano?, ¿a qué ciudadanía aspiramos?, ¿qué saberes y competencias permiten desenvolverse con responsabilidad en la sociedad? Se analiza cómo incluir estos contenidos en la organización curricular, proponiendo su tratamiento transversal, como también su abordaje en un espacio con carga horaria propia (este último en el tercer ciclo). En el marco de esta propuesta, se aborda el concepto de transversalidad: ¿qué quiere decir transversal y en qué sentido estos contenidos son transversales? En la búsqueda de criterios de organización de los contenidos en cuestión, se enuncian distintas perspectivas transversales y se desarrolla una síntesis del enfoque de cada una de ellas y de su contribución a la formación de la ciudadanía que la escuela intenta construir. Por último, se presentan algunos criterios para el abordaje didáctico, enfatizando como estrategia los proyectos de trabajo en el aula. Con el fin de brindar orientaciones al respecto, se incluye un esquema de fases útil para la gestación de proyectos.

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